Se desarrollaba la séptima jornada de este Campeonato del Mundo de Londres y el día ofrecía emociones fuertes. Con un tiempo mucho más apacible que en otras jornadas y una temperatura más elevada, hasta siete de nuestros atletas lucharían por conseguir sus objetivos. Nuestra capitana Ruth Beitia (clasificación altura), Pablo Torrijos (final triple salto), Ana Lozano (clasificación 5000), Esther Guerrero (clasificación 800), y el trío del ‘milqui’ con Adel Mechaal, Davis Bustos y Marc Alcalá; con diferentes opciones pero todos con el fin de dejarse la piel en la pista por su sueño.
Ana Lozano era la única representante española en la clasificación del 5000. Pasaban las 5 mejores de cada serie y los 5 mejores tiempos de la general. En una carrera muy compacta y lenta, Ana supo colocarse perfectamente en todo momento aunque acabó descolgándose con el último cambio de ritmo de la keniata Obiri. La manchega cruzó la línea de meta en décima posición con 15.14.23, marca personal y mejor marca española del año.
Ya en zona mixta declaraba estar contenta con la carrera, “me he sentido bien, he corrido con ganas y me he visto competitiva hasta el último cambio que no he podido aguantar”. Lozano cruzaba entonces los dedos, quedaba una serie por disputarse y aun podía haber opciones de clasificarse por tiempos. Agónicos 15 minutos con final amargo, la segunda serie fue más rápida y Ana acababa vigésima en la clasificación general. Cumplió su objetivo, la actual campeona de España vuelve a casa después de darle un buen mordisco a su anterior registro en la que acaba siendo la mejor temporada de su vida.
Esther Guerrero no tuvo mejor suerte y también cayó en la ronda clasificatoria de los 800 metros. Lejos de sus mejores tiempos (2.00.77 de mejor marca personal conseguida esta misma temporada), la también campeona de España entró quinta en su serie con 2.02.22 después de haber salido valiente y haber lanzado la carrera. Estos eran sus segundos campeonatos del Mundo, la catalana debutó en Pekín hace ya dos años.
Otro trío de españoles disputaba la clasificación de los 1500. Solo Adel Mechaal avanza a las semifinales al conseguir el pase por puestos. Se clasificaban los 6 primeros de cada carrera y los 6 mejores tiempos, entró sexto en su serie (3.38.99). El campeón de España ocupó una posición retrasada durante casi toda la carrera para acabar dando el cambio en la última vuelta a la pista. Controló las posiciones en todo momento dejándose ir en los metros finales. Luchará por estar en la final en una temporada muy complicada para él tanto en lo personal.
David Bustos corrió en una serie demasiado lenta, todo el grupo fue muy compacto hasta los últimos metros y el atleta balear se quedó descolgado al no conseguir responder al cambio de ritmo final. Entró decimo tercero (3.47.52) solo por delante del atleta americano Centrowitz, campeón Olímpico en Río y eliminado, para sorpresa de todos, en esta primera ronda. El español, finalista Olímpico, bronce en el Europeo y repescado para este Mundial de Londres, finaliza así una temporada para el olvido.
Marc Alcalá salió valiente y lanzó la carrera desde el principio y casi hasta el final sin ser apoyado por ningún otro atleta. El español pagó el desgaste inicial y empezó a perder posiciones al toque de campana. Se quedó sin cambió para los metros finales donde fue rebasado hasta por 9 atletas; entró décimo con 3.43.28.
Pablo Torrijos disputó la final en los que son sus primeros Campeonatos del Mundo. El triplista quería ser finalista y se va de Londres sin su objetivo. Torrijos realizó un concurso limpio, 16.60, 16.51 y 16.53 metros, insuficientes para pasar a la mejora, y teniendo que ‘conformándose’ con un décimo puesto y 20 centímetros menos que en la ronda clasificatoria. El castellonense no acaba aquí la temporada, en zona mixta dejaba claro que quiere seguir compitiendo, “quiero acabar la temporada con marca personal y satisfecho, hoy me voy de aquí triste”. Su mejor registro en pista al aire libre tiene apenas dos meses, fue en la Liga de Clubes y rozó los 17 metros (16.96). Estaremos atentos…
Mientras tanto Ruth luchaba por clasificarse para la final de salto de altura después de unos meses muy complicados para ella. La saltadora nunca había estado lesionada durante tanto tiempo, la incertidumbre de cara a esta competición parecía apoderarse de ella por momentos. Estos son sus octavos mundiales.
1.80, 1.85 y 1.89 metros a la primera. No pintaba nada mal el comienzo de concurso de la española franqueando sin dificultad alturas en las que ya empezaban a fallar otras saltadoras. Se empezó a complicar la cosa cuando con el listón en 1.92 no fue capaz de pasarlo en los dos primeros intentos. Pero no, Ruth no falló y a la tercera superó la altura requerida para estar en la final del próximo sábado.
“A partir de hoy toca soñar con esa final y a luchar por el puesto que me toque. Estoy feliz y todo esto es gracias a Ramón que es mi 50%. En esta temporada complicada es todo gracias a él y a todos los que han estado apoyándome en los momentos difíciles”. Sus palabras en zona mixta nos recordaban también que hace ya cinco años de su fugaz retirada después de los Juegos Olímpicos que se disputaron en el mismo estadio de este Mundial.
Por suerte, nuestra capitana volvió y a día de hoy sigue siendo un seguro, una garantía que nunca falla, que siempre está ahí.